martes, 5 de febrero de 2013

Control postural

Hoy os proponemos varias actividades para trabajar la postura con los más pequeños.



Las siguientes actividades las realizaremos en el patio, gimnasio, polideportivo, aula de psicomotricidad… del colegio debido  a la necesidad de espacio para realizar las diversas actividades propuestas:

1.       ¡Mira cuánto he crecido!
Los niños se colocarán en dos filas y comenzarán a andar sobre sus metatarsos, sin flexionar las piernas ni apoyar los talones y con los brazos estirados hacia arriba, estirando su cuerpo al máximo. Cuando lleguen al punto marcado regresarán a la salida trotando suavemente.
Este ejercicio se repetirá durante unos 5 minutos, logrando que todos los niños hayan realizado el ejercicio las mismas veces.

2.       ¡Soy el Rey!
Antes de comenzar, el docente orientará acerca de qué movimientos se deben y no hacer.
Aleatoriamente, elegimos “un Rey”, éste deberá adoptar diferentes posiciones, el resto del grupo le imitará, hasta que el Rey cambie de posición.
Repetiremos dicha actividad hasta que todo el alumnado haya sido “Rey”.
3.       ¡Que no caiga!
Este juego le dividiremos en varias etapas:
a)      Por parejas, los niños deberán soplar un globo de modo que éste no caiga al suelo.
b)      Por parejas, caminarán por un espacio pre-delimitado y en línea recta soplando el globo para que éste no toque el suelo. Regresarán a la salida trotando suavemente.
Si el globo se cae, le recogerán del suelo y seguirán el recorrido desde ese punto.
c)       De forma individual repetirán los dos ejercicios anteriores.

Durante toda la actividad el tronco debe permanecer recto, los hombros hacia abajo y la vista al frente y arriba.

4.       Pelea de gallos

En parejas, se comienzan a dar pequeños saltitos y a empujar al compañero con ambas manos, brazos ligeramente flexionados. No se deben de agarrar las manos ni empujar, este juego se realiza contra tiempo se relaja para continuar. El tronco debe permanecer bien recto, la vista al frente. Se cuidará de que las parejas sean homogéneas, para que la diferencia de fuerzas no sea significativa.

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