Hoy os proponemos varias maneras de iniciar o acercar los
animales a los más pequeños:
El estudio de los animales en el primer ciclo lo
orientaremos al estudio de sus características partiendo de los conocimientos
grupales sobre las mismas.
Para ello, iremos trabajando día a día los siguientes
aspectos:
D1:
Les explicaremos que vamos a ir trabajando los animales
en los siguientes días. Entre todos diremos nombres de animales que los niños
conozcan, más tarde, dibujarán y pintaran dichos animales. Si no diera tiempo a
dibujarles todos los niños podrán terminar los dibujos en la hora de plástica o
en casa.
D2:
Se usará el corcho de la clase, así como los dibujos que
los niños crearon el día anterior.
En la parte más alta se pondrán diversos carteles creados
para la ocasión, en ellos pondrán “agua-tierra-aire”. Cada niño irá saliendo al corcho con los
animales que dibujó el día anterior y les colocará debajo del título que crea
conveniente. A la vez que los niños van colocando los animales, el profesor irá
apuntando la clasificación en una hoja. Más tarde se quitarán todos los
animales del corcho y se repetirá la misma actividad, esta vez clasificando los
animales dependiendo si éstos son domésticos o salvajes. El profesor apuntará
nuevamente los resultados en la hoja anterior, la fotocopiará y entregará a los
alumnos la siguiente hora.
D3:
El tercer día en vez de clasificar los animales los
estudiaremos uno a uno.
Para ello, se dividirá la clase en cinco grupos, de 4-5
personas cada uno. Se les entregarán tantos dibujos realizados el primer día
como miembros tenga el grupo así como una pequeña ficha en la que los niños
tendrán que completar los siguientes datos de cada animal:
-
¿Tiene plumas?
-
¿Tiene pico?
-
¿Tienen escamas?
-
¿Tienen pelos?
-
¿Tienen patas?
-
¿Vuela?
-
¿Repta?
Una vez rellenadas todas las fichas cada grupo expondrá
sus conclusiones al resto de la clase.
D4:
Para terminar la propuesta llevaremos a cabo una pequeña
evaluación.
Para ello, iremos diciendo características de algún
animal estudiado hasta que los niños adivinen de qué animal estamos hablando.
Para contestar no deberán decir el nombre del animal, sino que deberán
imitarle, bien con gestos bien con sonidos.
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