Hoy os
presentamos un juego que mezcla la motricidad fina y la reacción.
Para ello
necesitaremos cinco pinzas (de plástico o madera, de tender la ropa) por cada
alumno, así como que todos los niños lleven prendas de manga larga.
Cada niño
se pondrá sus cinco pinzas en uno de los brazos (si son diestros en el
izquierdo y sin son zurdos en el derecho). A la señal intentarán librarse de
sus pinzas, siempre una a una, poniéndoselas a sus compañeros en los brazos, a
la vez que intentan que no les pongan a ellos ninguna. Si a la hora de poner
una pinza ésta se cae la persona que la estaba poniendo la recupera, si durante
la carrera se cae alguna pinza el que la perdió debe regresar a por ella.
Cuando un
niño se quede sin pinzas termina el juego, éste se detendrá cuando una cuarta
parte de la clase haya terminado (después hay muchas pinzas para pocos niños y
es muy difícil quedarse sin ninguna)
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